Autor: Roberto Dromi

Encuadernación: Rústica

Páginas: 253

Edición: 1ª

Año: 1992

ISBN: 950-9385-15-6

El poder judicial no fue ajeno a la crisis política institucional que afectó a la Argentina por varias décadas.

Hoy, ante el déficit en la administración de justicia, la falta de credibilidad en la misma va en aumento. Por ello las preguntas ¿el Judicial, es uno de los tres poderes?, ¿es el tercer poder?, ¿tiene un tercio del poder?

¿Hasta cuándo con las tardanzas de la justicia; la obsolescencia de los procedimientos; la cultura burocrática del expediente; los trámites interminables; ¿los “tribunales-rancho”, sin infraestructura ni computadoras?

¿Hasta cuándo los “jueces” administrativos, fiscales, de faltas, militares, vecinales, que no son “jueces judiciales”?

¿Hasta cuándo con jueces politizados, de facto, en mora, autolimitados? ¿Es el judicial el verdadero juez? ¿Cuál es el identikit del juez verdadero?

Para volver a la “justicia afianzada” se necesitan urgentes reformas orgánicas y legislativas, que se proponen en este ensayo a modo de soluciones. La justicia en democracias exige reafirmar el status de los jueces. No hay mas jueces que los jueces de la ley y para la ley, que los jueces de la República y para la República. Ellos son los únicos portavoces para la realización de la Justicia. Esa es la receta para rescatar la jerarquía institucional del Poder Judicial y de sus protagonistas: los jueces.

Los jueces

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Autor: Roberto Dromi

Encuadernación: Rústica

Páginas: 253

Edición: 1ª

Año: 1992

ISBN: 950-9385-15-6

El poder judicial no fue ajeno a la crisis política institucional que afectó a la Argentina por varias décadas.

Hoy, ante el déficit en la administración de justicia, la falta de credibilidad en la misma va en aumento. Por ello las preguntas ¿el Judicial, es uno de los tres poderes?, ¿es el tercer poder?, ¿tiene un tercio del poder?

¿Hasta cuándo con las tardanzas de la justicia; la obsolescencia de los procedimientos; la cultura burocrática del expediente; los trámites interminables; ¿los “tribunales-rancho”, sin infraestructura ni computadoras?

¿Hasta cuándo los “jueces” administrativos, fiscales, de faltas, militares, vecinales, que no son “jueces judiciales”?

¿Hasta cuándo con jueces politizados, de facto, en mora, autolimitados? ¿Es el judicial el verdadero juez? ¿Cuál es el identikit del juez verdadero?

Para volver a la “justicia afianzada” se necesitan urgentes reformas orgánicas y legislativas, que se proponen en este ensayo a modo de soluciones. La justicia en democracias exige reafirmar el status de los jueces. No hay mas jueces que los jueces de la ley y para la ley, que los jueces de la República y para la República. Ellos son los únicos portavoces para la realización de la Justicia. Esa es la receta para rescatar la jerarquía institucional del Poder Judicial y de sus protagonistas: los jueces.